Las colaboraciones público-privadas como herramientas de privatización. El caso de Sanidad
Audita Sanidad, Nicola SchererEn este informe se muestra cómo las concesiones público-privadas favorecen al sector privado y a la clase política gobernante, mientras socavan las arcas públicas sin responder a las necesidades de la ciudadanía.
Las colaboraciones o concesiones público-privadas, también llamadas asociaciones o partenariados, nacieron en 1992 en el Reino Unido como treta contable para esquivar las restricciones del gobierno sobre el endeudamiento público. A medida que en Europa y resto del mundo se comenzó a limitar el endeudamiento público con medidas de austeridad, también se disparó la utilización de concesiones público-privadas como componente de la política de privatizaciones y una forma de equilibrar los presupuestos ocultando el endeudamiento. La deuda es un mecanismo clásico de creación de dinero y un proceso antiguo de acumulación de capital que se ha convertido en la principal herramienta de control del capital sobre los pueblos. A través de ella, el neoliberalismo somete las decisiones de inversión de una sociedad a consideraciones que no tienen como objetivo mejorar la vida de las personas, sino a su reembolso. Los sobrecostes generados inciden
directamente en el incremento de la deuda.
En la práctica, los gobiernos desarrollan políticas orientadas a despojar a la población de derechos adquiridos históricamente y a trasvasar financiamiento de los proveedores públicos hacia los privados. En el caso de España, la estrategia neoliberal en los servicios sanitarios, está orientada por la denominada tríada neoliberal: disminución del papel del Estado e introducción de copagos-repagos, expansión del sector privado en el sistema de salud y desregulación del sector público sanitario. Desmontar los sistemas sanitarios públicos es un medio para restringir derechos, trasladar el gasto sanitario a la población y una forma de apropiación de los fondos públicos destinados a la s